¿Qué es una llave patentada y por qué es más segura?

Depositamos una gran confianza en nuestras llaves, ya que son el medio que nos brinda acceso a nuestro hogar y garantiza su seguridad.

Además, son una herramienta esencial en nuestra vida cotidiana, y nos preocupa constantemente perderlas o que alguien las robe.

¿Pero qué pasaría si pudiéramos hacer que estas llaves fueran imposibles de copiar?

A veces, nos enfocamos en la seguridad desde una perspectiva puramente física.

Tener una puerta sólida y un sistema de cierre robusto es importante, pero si cualquiera puede duplicar nuestra llave con facilidad ya bajo costo en cualquier ferretería, ¿realmente podemos considerar que esa llave es "segura"?

La evolución de los sistemas de cierre ha sido lenta en la historia, principalmente porque se buscaban estándares estándar y cómodos.

Esto es lo que ha llevado a las cerraduras mecánicas a ser dominantes, ya que son probadas, duraderas y cumplen su función.

Sin embargo, existe un problema con las llaves estándar: su facilidad para ser copiadas.

Dado que siguen un estándar, cualquiera puede duplicarlas en una ferretería sin restricciones.

Para abordar este problema, la industria ha desarrollado tecnologías de protección de patentes que permiten modernizar la idea de la llave mecánica y superar su mayor limitación en términos de seguridad: su facilidad de copia.

Esto se logra mediante llaves patentadas.  

En qué consisten las llaves patentadas

Cuando nos referimos a llaves patentadas, estamos hablando de cilindros cuyas llaves NO se pueden replicar o duplicar de manera sencilla. Es por esta razón que se les conoce también como llaves NO duplicables.

Estas llaves son, por lo tanto, inmunes a la clonación en ferreterías comunes.

El control sobre el número de copias para cada bombillo recae en el fabricante, y de manera lógica, no se realizarán copias a menos que el solicitante pueda demostrar la propiedad legítima del bombillo en cuestión.

El gran obstáculo que enfrentaría alguien que intenta llevar a cabo una copia ilegal de nuestra llave no es solo la complejidad inherente al proceso de duplicación, que también es un factor, sino que además sería imposible obtener el modelo original de la llave.

Las llaves patentadas cuentan con la protección legal proporcionada por el fabricante. Una patente implica un derecho exclusivo sobre un producto o metodología específica.

Implicaciones legales de la patente de una llave

Solo el proveedor tiene el poder de fabricar llaves en bruto. Intentar copiar estas llaves constituiría una violación de los derechos de propiedad intelectual del fabricante.

Por lo tanto, incluso en el improbable escenario de que alguien lograra realizar una copia, se encontraría en serios aprietos legales con el fabricante y se expondría a severas sanciones económicas.

Protocolos de las llaves incopiables

Tarjeta de Propiedad: Este método es ampliamente utilizado y efectivo. Al adquirir un cilindro de cerradura, se proporciona una tarjeta de propiedad. Esta tarjeta debe presentarse en los establecimientos autorizados por el fabricante para obtener copias adicionales de la llave. La tarjeta de propiedad certifica que el cilindro te pertenece y que tienes el derecho exclusivo de solicitar duplicados.

Precauciones de las llaves patentadas

Es esencial comprender que, aunque las llaves patentadas ofrecen numerosas ventajas, en ciertos casos muy específicos pueden presentar desafíos adicionales. Aunque son una elección ideal para la seguridad en hogares, pueden resultar un proceso más complicado en situaciones como portales o propiedades compartidas.

En estos escenarios, es fundamental reconocer que el administrador de fincas asume la responsabilidad de supervisar la duplicación de llaves y decidir quién tiene permiso para realizarla. A pesar de que este proceso puede ser más engorroso, no compromete la seguridad, sino que, al contrario, la fortalece significativamente. Las llaves patentadas ofrecen un nivel de seguridad superior, ya que restringen el acceso a portales, áreas comunes e incluso garajes, evitando riesgos potenciales.

En general, exceptuando estas situaciones particulares, la elección de una llave patentada sigue siendo la alternativa más segura al reemplazar un cilindro de cerradura. De esta manera, puedes tener la tranquilidad de que, incluso si prestas la llave, nunca se podrá realizar una copia sin tu autorización.